JaviLar Kids muestra al mundo su colección de Otoño-Inviernoi 2025-2026 de bajo el nombre “Hadas de Invierno” en la Feria Baby Kids + Fimi en la edición Otoño -Invierno.
La colección de ceremonia para niñas “Hadas de Invierno” evoca un universo de ensueño inspirado en los paisajes invernales más mágicos, donde la fantasía se fusiona con la elegancia en cada detalle. Cada vestido ha sido diseñado para transportar a las pequeñas a un reino encantado, donde las auroras boreales bailan en el horizonte, los cristales de hielo centellean al sol y los mantos de nieve se extienden en un paisaje de ensueño bajo cielos estrellados. Esta colección no solo celebra la belleza del invierno, sino que la transforma en moda, llevando a las niñas a protagonizar su propia historia de hadas heladas.
La inspiración para “Hadas de Invierno” nace de la contemplación de paisajes gélidos y misteriosos. La diseñadora se sumerge en la sublime belleza de las auroras boreales, esas cortinas de luz que dibujan el cielo en tonos esmeralda y violeta, y lo transforman en motivos que se reflejan en los estampados delicados y las texturas de los vestidos. Los cristales de hielo se convierten en bordados brillantes que adornan los conjuntos, imitando la fragilidad y resplandor que se encuentran en la naturaleza. Los mantos de nieve y los cielos estrellados son la paleta de fondo sobre la que se construyen los diseños, envolviendo cada pieza en un aura de misticismo y fantasía.
Los colores utilizados en la colección capturan la esencia del invierno con un toque de ensueño. El dorado y el plateado aportan un brillo celestial que remite a la luz de las estrellas y la magia del hielo. El rosa nude suaviza la composición, aportando inocencia y ternura propias de la infancia, mientras que el rojo intenso aporta pasión y calidez en contraste con el frío invernal. El azul marino profundiza el aspecto nocturno, recordando los vastos cielos estrellados, y el rojo combinado con detalles en negro añade un dramatismo sutil y sofisticado que destaca en el tejido y la silueta del vestido. Esta paleta, rica y contrastante, logra que cada prenda emane una atmósfera única que captura la mirada y el corazón.
Para materializar este mundo fantástico, se han seleccionado tejidos de calidad superior que aportan estructura y fluidez a la vez. El brocado, con sus intrincados patrones y rica textura, es ideal para reflejar la opulencia de la corte de hielo, mientras que el mikado aporta firmeza y forma, otorgando cuerpo a la silueta de cada vestido. El tul, ligero y etéreo, imita la suavidad de la nieve recién caída y contribuye al efecto onírico, y el othoman, con su superficie lisa y elegante, añade un toque de sofisticación y confort. La combinación de estos tejidos realza los detalles y el movimiento, haciendo que los vestidos parezcan cobrar vida mientras la niña se mueve, como si estuviera danzando con los espíritus del invierno.
Los vestidos de “Hadas de Invierno” se distinguen por sus mangas 3/4 y largas, perfectas para evocar la sensación de estar abrigadas en un manto de nieve, a la vez que permiten libertad y comodidad. Las faldas con tablas aportan estructura y volumen, recordando la majestuosidad de los castillos de hielo y la solidez de las escarchadas colinas invernales. La atención se centra especialmente en los escotes en las espaldas, que, al ser el protagonista del vestido, se convierten en la joya de cada prenda. Estos escotes revelan sutilmente la espalda, adornados con delicados inspirados en patrones de hielo fracturado, acentuando la gracia y elegancia de cada niña como si fuera un hada nacida del invierno.
Cada conjunto de la colección “Hadas de Invierno” no solo es un vestido, es una invitación a la fantasía. Los paisajes gélidos, los cielos estrellados y las auroras boreales no son meras imágenes, sino sensaciones que se plasman en los colores, tejidos y siluetas. Al vestir una de estas prendas, la niña no solo lleva puesta una hermosa creación, sino que se convierte en parte de un cuento invernal, envuelta en una armadura de elegancia y magia que refleja la pureza del hielo y la calidez del corazón. Los detalles cuidadosamente seleccionados, desde el brillo dorado y plateado hasta los contrastes dramáticos del rojo y negro, conforman una experiencia visual y sensorial que perdurará en la memoria, haciendo de cada ceremonia un evento inolvidable en el que la fantasía invernal se convierte en realidad.
